Cirugía plástica, cada vez que escuchamos dichas palabras se nos viene a la cabeza la idea de una mejor estética que relacionamos directamente con la vanidad; sin embargo, algunas cirugías de esta dimensión, como lo es la cirugía de párpados, tienen un impacto directo en el mejoramiento de patologías relacionadas a la salud.
Mucho es lo que se puede leer acerca de la cirugía de párpados o blefaroplastia, y sin duda no se puede decir que la mayoría de estas intervenciones no están relacionadas a un interés netamente estético de parte del paciente. Pese a esto, también se ha popularizado para mejorar ciertas condiciones médicas enfocadas en el entorno del ojo y la mejora de la visibilidad.
Como lo hemos mencionado en artículos anteriores, la blefaroplastia es una cirugía plástica que se centra en la corrección del descolgamiento de los párpados superiores, así como de las bolsas inferiores; es gracias a esto que se ha posicionado como la tercera cirugía más solicitada en el país, en especial por hombres y mujeres después de los 50 años.
Así pues, la blefaroplastia se concentra en el mejoramiento de la mirada, devolviéndole vitalidad y juventud, quitándole al rostro ese aspecto apagado y triste que trae consigo las bolsas, ojeras y párpados caídos. Ahora bien, tras su beneficio estético también se atañe el beneficio médico, ya que gran parte de los pacientes que recurren a este tipo de cirugía, van reduciendo paulatinamente su campo visual, afectando la forma en la que sus ojos se comportan a diario.
La cirugía de párpados no solo ofrece una mejora estética, también le otorga al paciente una mejora funcional.
Sus beneficios en el mejoramiento de la visibilidad de los pacientes, los párpados, la órbita y cavidad ocular, así como de las vías lagrimales, la hacen una cirugía que, realizada correctamente, puede ayudar a mejorar la calidad de vida de cada paciente. Además, hay que tener en cuenta que la zona que compone al ojo se caracteriza por ser delicada, cuya piel es extremadamente sensible, por lo que los resultados de esta cirugía se deberán centrar no solo en ser naturales y armoniosos, sino que también en ser acordes a la anatomía del ojo y en respetar su funcionabilidad.
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La importancia de consultar con un experto
Pese a todas las ventajas que trae consigo este tipo de cirugía y a su presumida sencillez, nunca está de más aconsejar la consulta de manos de un experto, ya que la mala realización del procedimiento puede no solo cambiar el aspecto natural del rostro, sino que también ocasionar consecuencias irreparables para la salud, como:
- Lagrimeo.
- Irritación crónica.
- Sequedad ocular.
- Úlceras corneales.
Recuerde que un buen procedimiento estético solo puede ser garantizado por un equipo profesional, que cuente con la experiencia y titulación apropiada para cada caso. Además, los resultados de la cirugía se pueden apreciar casi que inmediato, por lo que es importante saber que lo que ocurre en nuestro rostro nunca será fácil de ocultar.
La cirugía de párpados es entonces, la forma más sencilla de renovar la imagen del rostro, levantar y tensar la piel de los párpados, quitar las molestas bolsas e iluminar la mirada, mejorar la visibilidad y otorgar una mejor funcionabilidad al ojo y su contorno.