Quizás hayas llegado hasta aquí decidido a buscar información relevante acerca de los riesgos de usar anestesia en una intervención quirúrgica para mejorar tu aspecto físico, algo que puedes estar pensando a corto o medio plazo. Si es así, vamos al grano: la anestesia es uno de los factores de riesgo a tener en cuenta. A continuación, encontrarás algunos puntos clave para estar seguros durante una cirugía plástica.
1. ¿Qué son la anestesiología y la anestesia?
La anestesiología es una rama especializada de la medicina que se encarga, entre otras cosas, de preparar al paciente por medio de la aplicación de fármacos anestésicos (ya sean de aplicación local o general) con el fin de evitarle el dolor durante una intervención quirúrgica.
La administración segura de la anestesia es un factor fundamental a la hora de efectuar cualquier cirugía. Por esta razón, los cirujanos siempre deben estar acompañados de un médico anestesiólogo durante todo procedimiento que implique dolor.
2. ¿Qué tipos de anestesia existen?
Existen dos tipos principales de anestesia: la anestesia local y la general. Tal como su nombre indica, con la primera se busca eliminar la sensación de dolor en alguna parte específica del cuerpo, siempre estando el paciente consciente durante el procedimiento.
La anestesia general, en cambio, busca sedar totalmente al paciente, el cual permanece inconsciente durante todo el proceso quirúrgico.
También te va a interesar: Cirugía segura ya: conozca cómo consultar si tu cirujano hace parte de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica.
3. ¿La anestesia puede ser dañina o nociva para la salud?
Has de saber que, en general, la anestesia aplicada por un profesional idóneo, adscrito a la Sociedad Colombiana de Cirugía, es muy segura. Es raro que se presenten complicaciones. De haberlas, tienen que ver más con la salud de los pacientes y sus enfermedades previas (o con la alta complejidad de un procedimiento) que con la anestesia en sí.
4 ¿Cuáles pueden ser los efectos secundarios de la anestesia?
Algunos de los efectos secundarios más comunes son: náuseas y vómitos, que también pueden ocurrir los primeros días del posoperatorio, dolor de garganta (debido a la intubación necesaria en la anestesia general) y confusión y desorientación pasajeras.
Por otro lado, también son frecuentes los dolores musculares (especialmente cuando se han usado fármacos denominados relajantes musculares) y escalofríos e hipotermia, ya que la anestesia puede producir una disminución en la temperatura del paciente.
5. ¿Quiénes tienen mayores riesgos de presentar complicaciones con la anestesia?
Algunas personas tienen mayores riesgos. Por ejemplo, los pacientes obesos, fumadores, hipertensos no controlados, diabéticos o con problemas cardiacos y renales necesitan un tratamiento más cuidadoso por parte del anestesiólogo.
Para evitar estas complicaciones, no olvides que todo candidato a cirugía es estudiado detalladamente y, si es necesario, se pospondrá la intervención mientras el riesgo sea alto.
5. ¿Puede llegar a ser mortal la anestesia?
La anestesia podría llegar a ser mortal si no se maneja con el debido cuidado y por parte de profesionales expertos. Sin embargo, cuando se cuenta con un quirófano bien equipado, además de un equipo médico y profesional idóneo, los procedimientos quirúrgicos presentan un riesgo mínimo de ocasionar complicaciones debidas a los fármacos anestésicos.
Si bien es cierto que se han reportado algunas condiciones genéticas muy particulares de intolerancia a algunos anestésicos, estos casos son extremadamente raros.
En conclusión, recuerda que en toda intervención existen riesgos y la cirugía estética no es la excepción, aunque debes tener en cuenta que estas complicaciones dependen más de lo invasivo y complejo que sea el procedimiento que de la anestesia administrada para evitar el dolor en el paciente.