Arrugas o marcas de expresión, ojeras, párpados caídos… son muchas personas las que se plantean llevar a cabo una cirugía estética en los párpados. Tanto por motivos estéticos como para mejorar la visión, vamos a ver en qué casos este tipo de cirugía merece realmente la pena.
La cirugía de párpados o blefaroplastia consiste en la remodelación de los tejidos que rodean los ojos para conseguir una mirada más joven y un mejor aspecto de los ojos. Se puede llevar a cabo tanto en los párpados superiores (blefaroplastia superior) como en la zona bajo el ojo (blefaroplastia inferior). También se incluye en este grupo la cirugía de levantamiento de cejas.
¿En qué casos está indicada la blefaroplastia?
Habitualmente, por motivos estéticos:
- Para eliminar arrugas o marcas de expresión.
- Eliminar ojeras o bolsas bajo los ojos.
- Corregir los párpados caídos.
- Para conseguir una mirada más joven.
También puede indicarse por motivos de salud, cuando a causa de los párpados demasiado caídos o las bolsas se dificulta la visión.
¿Soy un buen candidato para una blefaroplastia?
La cirugía estética en los párpados es una intervención sencilla y poco invasiva, por eso se puede llevar a cabo en casi cualquier persona.
Solo si padeces determinadas alergias al material empleado en la cirugía o estás tomando alguna medicación incompatible con la medicación, no se podrá llevar a cabo. El cirujano pedirá tu historial médico antes de la operación y estudiará tu caso, de manera que determinará si reúnes las características para esta intervención.
Además, debes saber que esta técnica no elimina las patas de gallo, pero sí puede mejorar su aspecto, ya que elimina las arrugas circundantes.
Por tanto, esta cirugía es adecuada para ti si tienes marcas de expresión, pequeñas arrugas alrededor de los ojos, ojeras o párpados caídos; independientemente de tu edad. También si quieres perfeccionar la forma del ojo, levantar el arco de las cejas o igualar dos ojos asimétricos.
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¿Cuáles son los inconvenientes de la blefaroplastia?
Ahora bien, para saber si esta operación es para ti, te recomendamos tener también en cuenta estas desventajas antes de decidirte por esta intervención estética:
- Se puede experimentar dolor los primeros días tras la operación. Sin embargo, en unos 3-4 días este dolor en los párpados desaparecerá.
- Asimismo, en estos primeros días, puede haber inflamación y se ven las marcas. Esto es normal y tras un tiempo no quedarán cicatrices ni ninguna otra señal.
- Probabilidad de infección: aunque es pequeña, algunas personas han tenido infecciones en la zona tras la operación. Si manifiestas los síntomas de una infección, como inflamación anormal, rojez, fiebre, etc. el equipo médico te recetará antibióticos y la infección remitirá.
- Visión borrosa: a veces se produce en los primeros días de la operación.
- Sangrado: como en otras intervenciones, existe una pequeña probabilidad de sangrado los primeros días tras la intervención. Por ello es importante no estar en tratamiento de anticoagulantes ni analgésicos como la aspirina en el momento de la intervención.
- Edema palpebral: es una inflamación que puede producirse en los párpados tras la intervención. Tu médico indicará el tratamiento necesario dado el caso.
- Equimosis: se trata de la aparición de moretones en el contorno de ojos tras la operación. Suele desaparecer un tiempo después de la operación.
- Puede ser necesaria otra intervención: siempre existe la posibilidad de que los resultados no sean exactamente como esperabas o que descubras que los ojos han quedado ligeramente asimétricos. En ese caso puede ser necesaria otra cirugía.
Como ves, tras una blefaroplastia seguramente lucirás una mirada más joven, pero no debes olvidar que se trata una cirugía, por lo que los primeros días puedes experimentar los efectos que hemos descrito.