Actualmente, es muy frecuente encontrar distintas alternativas para obtener el peso y la figura corporal deseados. Sin embargo, es importante tener en cuenta todos los factores que influyen en cada método y cómo logran mantener los resultados obtenidos. Los métodos de adelgazamiento no quirúrgico son una buena alternativa para personas que no desean someterse a una cirugía estética o que, por cuestiones de salud, no son aptas para estas.
1. Busca un especialista confiable
Como en cualquier procedimiento estético, sea o no quirúrgico, debes elegir un especialista que cuente con todos los permisos necesarios para realizarlo. La confianza que le tengas a tu equipo médico influye a la hora de establecer una buena comunicación que permita que este entienda tus deseos, y así lograr resultados que se acomoden a tus expectativas.
2. Sigue al pie de la letra las indicaciones de tu médico
Lograr buenos resultados a largo plazo no solo depende del tipo de procedimiento o de las estrategias de tu médico. La mayoría de las veces no se consigue un efecto deseado porque los pacientes no siguen las indicaciones dadas por el especialista. Es por eso que, para que mantengas ese peso deseado por mucho tiempo, es necesario cumplir las instrucciones antes y después del procedimiento. En caso de que el método de adelgazamiento se deba realizar en más de una sesión, es indispensable cumplir con los horarios y fechas establecidos por tu equipo médico.
3. Mantener la salud de tu cuerpo es tu responsabilidad
La ventaja de someterte a un tratamiento de adelgazamiento es que luego te verás en la necesidad de mantener un estilo de vida nuevo y mucho más saludable. Como no es un proceso quirúrgico, requiere de un cuidado exhaustivo para mantener los resultados a largo plazo. A lo mejor, luego de acabado el proceso, se limitarán algunas de tus actividades y será muy importante seguir las especificaciones dadas antes del procedimiento. Sin embargo, esto no es una excusa para no renovar algunos hábitos.
Sigue una dieta alimenticia sana. Puedes consultar con tu especialista o médico general las mejores opciones que se adapten a tu cuerpo y a tus facilidades. De lo contrario, el procedimiento habrá sido en vano. En cuanto al ejercicio, es importante que mantengas una actividad física diaria, no exhaustiva, pero si constante. Esto no solo mantendrá los resultados en tu cuerpo, sino que lo llenará aún mas de energía y motivación.
4. Los procesos lentos requieren de paciencia
A diferencia de los procedimientos estéticos, estos métodos son más seguros, pero los resultados se consiguen de forma más lenta. Es normal que después de la primera sesión no veas lo que esperabas, o los cambios no hayan sido tan grandes como querías. Sin embargo, la clave para seguir progresando es mantener la paciencia y la motivación. Si mantienes hábitos saludables y sigues todas las indicaciones, ten por seguro que al final tendrás ese peso que siempre has querido. Además, aunque sean más lentos, los resultados también dependen de seguir un desarrollo de las sesiones constantemente, en los días y horas indicados. No pierdas la paciencia, tu cuerpo también recibe todas esas emociones, y es esencial que mantengas una estabilidad no solo física, sino también mental.
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Los métodos de adelgazamiento no quirúrgico son una gran opción cuando no eres apto para una cirugía o cuando las estrategias que has utilizado previamente no han resultado como esperabas.
En conclusión, la clave para lograr grandes y duraderos resultados no solo descansa en la profesionalidad de tu equipo médico. Es en mayor parte tu responsabilidad seguir las indicaciones antes y después, y mantener un cuerpo sano. ¡Motívate!
