En muchas ocasiones se cree que la extracción de biopolímeros puede realizarse con el mismo equipo que una liposucción, pero ¡nada más alejado de la realidad! Sigue leyendo para que conozcas la razón.
¿Qué es una cánula de liposucción?
Para entender la razón de lo anterior, es importante que conozcas lo que es una cánula y cómo se emplea tradicionalmente.
La palabra cánula deriva del latín que significa pequeña caña. Es un tubo largo y delgado que se inserta en la región del cuerpo que va a ser tratada para remover fluidos o grasa.
Están formadas por una empuñadura, la boquilla, el tubo y la vaina. La empuñadura, generalmente, es de aluminio laminado en forma cilíndrica y alargada. La boquilla y el tubo con punta roma se fabrican también con metales de uso médico.
Desde los primeros métodos de liposucción modernos, los especialistas han utilizado diferentes tipos de cánulas. Las variaciones son con respecto al tamaño, la longitud, la forma y el diámetro de los orificios; es comúnmente aceptado que cuanto más aberturas tienen, más eficientes son. Los tamaños más utilizados van de 4 a 6 mm de diámetro y de 20 a 30 cm de largo.
¿Para qué se utiliza la cánula?
En los tratamientos cosméticos, el objeto de la cánula es extraer grasa. Entre las funciones de este tipo especializado de tejido se encuentran: la reserva energética, el aislamiento, la termogénesis (producción de calor del cuerpo) y la función cosmética en el cuerpo de hombres y mujeres.
¿Por qué estas cánulas no sirven para extraer materiales poliméricos?
Porque están diseñadas para extraer únicamente grasa, que tiene características fisicoquímicas diferentes a las sustancias sintéticas “biodegradables” que se inyectan en tu cuerpo con fines estéticos.
Estas macromoléculas sintéticas pueden ser derivados de la silicona, hidrogel, metacrilatos, parafinas, mantecas, algunos tipos de aceites y, en los peores casos, sustancias imposibles de identificar.
Muchos pacientes acuden con médicos inexpertos que efectúan procedimientos para extraer estos compuestos sintéticos a través de cánulas de liposucción. Con frecuencia creen que extraer adipocitos y sacar gránulos de silicona es lo mismo, pero mira las diferencias:
- El tamaño. Los adipocitos se organizan en lóbulos que son relativamente fáciles de licuar y volverlos líquidos; de esta forma son succionados por la cánula sin problema. Cuando se inyectan sustancias ajenas al cuerpo, el organismo genera una respuesta inflamatoria y recubre al cuerpo extraño formando unas esferas duras. De esta forma, se generan glóbulos de mayor tamaño que nunca pasarán por la cánula usada.
- La consistencia. La grasa es un tejido natural, suave y fácilmente maleable; mientras que las esferas de gel mantienen una consistencia dura por la fibrosis que han causado.
Compactación del tejido
Una de las peores situaciones al tratar de remover las sustancias sintéticas del organismo con cánula es el efecto que se produce en el tejido.
Al introducir la cánula, obviamente se succionará solo grasa y no los gránulos tóxicos, lo que provoca el aumento de su densidad y la formación de estratos más duros y extensos en la zona del cuerpo. Al final solo obtendrás deformidades, hundimientos y mayor flacidez en la piel.
Por otro lado, recuerda que estos materiales sintéticos tienden a adherirse a los tejidos y el organismo los encapsula, por lo que no existen remedios caseros que corrijan este problema. ¡No te dejes engañar!
Realmente existen procedimientos y equipos probados por su efectividad en la remoción de sustancias sintéticas y lo mejor para lograr resultados satisfactorios es que acudas con un médico profesional y experimentado. Él te ofrecerá el tratamiento adecuado con base a la afectación de los tejidos, su consistencia y su ubicación.
Mantente saludable, ¡cuida tu cuerpo con los expertos!
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