Entre los diferentes tratamientos de rejuvenecimiento facial destaca el que se realiza con ácido hialurónico (AH). Se trata de un carbohidrato que todos producimos de forma natural y que se encuentra también en varios alimentos. Incluso su forma polifacética permite diversos tipos de aplicación.
Cuando los carbohidratos de AH están aislados se unen al agua y toman un aspecto gelatinoso. Esta sustancia es la que se utiliza en dicho tratamiento. Lo que hace el AH en la piel es que potencializa la hidratación de la misma, provoca la creación de elastina y colágeno en ella y se vuelve más elástica.
El AH está en nuestra piel en grandes cantidades cuando somos jóvenes y en la medida que avanzamos en edad disminuye. Es por eso que la piel de los adultos es más reseca. El tratamiento estético de AH consiste entonces en aplicar de manera externa esta sustancia a través de inyecciones en las áreas en donde se requiere. Se usa en los labios y en el rostro.
Por ejemplo, al infiltrarlo donde se generan las llamadas patas de gallo y donde se acentúan más las líneas de expresión las personas adquieren un aspecto más joven. Este gel dota a la piel adulta de una capacidad para retener agua hasta 500 veces más, crea una especie de malla entre la piel. Como es una sustancia natural hay desgaste y esto hace que una sesión de AH no baste para mantener la piel restaurada. Quienes toman este tratamiento a través de inyecciones deben realizar sesiones de aplicación cada año o cada seis meses según el metabolismo de quien se lo aplica. El resultado es una apariencia más joven.
Los tipos de ácido hialurónico
Principalmente existen dos:
AH de Alto Peso Molecular (APM)
Se puede aplicar como una capa hidratante a través de cremas y gel. Son moléculas grandes que penetran los poros y puede aplicarse de manera cotidiana.
AH de Bajo Peso Molecular (BPM)
Se conoce como fragmentado, que penetra mucho mejor en los poros de la piel. Se aplica a través de mascarilla de hidrogel y su efecto es más duradero.
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Es una sustancia muy noble que casi no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios. En algunos tipos de piel muy delicada o personas que tienen algún tipo de alergia severa cabe la posibilidad de que aparezcan hematomas, irritación de la piel y algo de molestia o dolor leve que desaparece en un periodo máximo de 48 horas. Como muchas otras sustancias no se recomienda su aplicación durante el periodo de embarazo y lactancia y en quienes pasen por un proceso infeccioso o inflamatorio. Según expertos que han estudiado estos casos de cien personas si acaso el 3 o el 5 % presentan el rechazo al producto.
Formas de aplicación del AH y beneficios
1. Como tratamiento médico el AH se utiliza también para tratar enfermedades reumáticas que dañan las articulaciones y artrosis, ayudan a que el paciente mejore su movilidad.
2. En odontología ayuda a los procesos de cicatrización, regenera la mucosa bucal y las encías.
3. Se aplica en inyecciones y en productos cosméticos con estos fines. Por ejemplo, en cremas o en gel ayuda a prevenir signos de envejecimiento.
4. Complemento alimenticio: Los alimentos que contienen el AH de manera natural son el salmón, las sardinas y otras carnes como el pato, el pollo y el pavo, la gelatina. También los alimentos que incluye antioxidantes E, C, y A. También se pueden solicitar como píldoras AH.
Las diversas formas de aplicar o ingerir el AH hacen que además de las sesiones que programes con tu clínica estética, puedas reforzarlas de manera cotidiana a través de alimentos y productos cosméticos.